martes, 18 de septiembre de 2012

LECCIONES QUE NOS DA LA VIDA




LECCIONES QUE NOS DA LA VIDA




Es curioso como se aprenden las cosas en la vida, como realidades que permanecen en el mundo inmutables y que desde el principio de los tiempos son así, nos son reveladas en determinados momentos de nuestras vidas de la forma más insospechadas.

Cuántas veces nos dicen dónde está el valor de la vida y cuantas veces seguimos pensando que está en el dinero, en el viaje, en una casa más grande, en más ropa en más relojes, en más…

Cuántas veces charlamos y nos charlan sobre como encontrar la felicidad en lo que parecen pequeñas cosas, en lo que parecen pequeños momentos y no nos lo creemos realmente o nuestras vidas serían más plenas.

Hay veces que conoces a personas y no te das cuenta lo que ellas han aportado a tu vida hasta que se van. Unas veces te das cuenta años más tarde de que se hayan ido y otras cuando se están yendo.

Las lecciones que son más difíciles que se te olviden, son las prácticas. Cuando te das cuenta que una persona está poniendo el énfasis de su vida por superar grandes obstáculos, y que pone la otra mejilla sin dejar de intentar que las cosas cambien, cuando ves a personas que dan amor a manos llenas, que no desesperan en el camino y que incluso casi sin poder andar, aún sacan fuerza para ayudar a los que tienen alrededor y los ayudan y de esa fuerza que da la unión es de la que tiran. Cuando ves que el amor al ser entregado se multiplica y esa multiplicación lleva a que el día a día sea bonito, aunque sea dentro de unas circunstancias poco agradables. Es cuando realmente te das cuenta que esa teoría que te cuentan de que “El Amor todo lo puede” es cierto.    

       

Nos dicen que “La vida es corta”, que “Hay que vivirla a tope” que “Carpe Diem” y la sensación, es que nos están diciendo: Ríete; disfruta tú; no te preocupes por los demás; tú eres lo más importante; se Dionísio o Afrodita, disfruta como si fueras ellos, con diversiones momentáneas, que no duran más que el momento del  éxtasis y la embriaguez… Cuando en verdad es: Ama el momento, pero ámalo amando a los demás, no tengas el corazón de piedra.



Cuando llegan malos momentos, no recuerdas las risas insustanciales, los coches o las casas, las joyas o los cuadros, las modas o los viajes; recuerdas los momentos vividos con amor, los momentos compartidos con amor, recuerdas las vivencias con personas que amas o en su defecto recuerdas la falta de amor que ha habido.



Por eso lo importante no es vivir a lo loco, llenando tu vida de cosas vacías, sino llenando tu vida de amor, perdonando, perdonando y perdonando.

Son estas lecciones que te dan determinadas personas en la vida las que se quedan grabadas en ti a fuego. Personas que en un principio parecen una más, pero que como la semilla de mostaza que siendo tan pequeña termina dando un árbol muy grande, no nos damos cuenta de la grandeza de estas personas hasta que pasa algún tiempo a nuestro lado.





Pero a veces, olvidamos estas enseñanzas dejándonos llevar por la pasión momentánea en los brazos de Venus o Baco,  Pensando que es allí, dónde reside la felicidad, y no recordamos lo realmente importante;  entonces tienen que cruzarse en nuestro camino, otra vez, personas que sin dar lecciones a viva voz la dan con su ejemplo, que desempolven la tablilla dónde un día nos grabaron a fuego la verdad inmutable. La importancia del Amor.

(Gracias a JM y a su familia)

1 comentario:

  1. Querido Alfonso:
    Tu entrada, aparte de intachable estéticamente, me ha emocionado, y mucho. Gracias por compartir cosas hermosas.

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